Una asana para equilibrar la respiración: Trikonasana
En trikonasana, o el triángulo, es una asana que encaja bien después del Saludo al Sol o bien, tras las flexiones hacia delante o hacia atrás o en la última parte de la sesión, antes del pranayama.
Entre sus beneficios está el desarrollo de la musculatura de la columna, rectificándola y restituyendo su movilidad, tonifica las abdominales y mejora el desequilibrio respiratorio (la mayor parte de las personas usan más un pulmón que otro); con trikonasana, vamos a airear los dos pulmones.
(nos fijamos en la posición del cuerpo en trikonasana)
Es una postura muy sencilla con grandes beneficios, si la ejecutamos correctamente pero sin llegar a competir por tocar el tobillo (como muy sabiamente me han dicho en alguna ocasión).
Vamos a la postura:
1) Nos situamos de pie, separando las piernas unos 120 cm e inhalando extendemos (en perpendicular al cuerpo) los brazos a los lados, con las palmas hacia abajo. Fíjate que el pie derecho apunta hacia la derecha (porque primeramente haremos ese lado).
2) Volteamos la palma izquierda hacia arriba y llevamos el brazo a la vertical, mirándonos la mano. Simultáneamente, exhalando, bajamos el brazo derecho, e inclinamos el tronco hacia la derecha mientras la mano derecha desciende, pegada al cuerpo, desde el muslo a su rodilla.
3) Tras tocar la rodilla, el pulgar y el índice siguen descendiendo por la tibia. El tronco sigue bajando hasta que los dedos toquen el pie. El brazo izquierdo habrá ido bajando hasta mantenerse en la horizontal, siempre en contacto con la cabeza.
4) Mantenemos en esa posición y realizamos diez respiraciones completas, especialmente conscientes en inhalar y exhalar completamente.
5) Volvemos a la vertical sin flexionar y hacemos el otro lado.
Además trikonasana tiene muchas variantes, por lo que podríamos practicar cualquiera de ellas y así no estar repitiendo siempre la misma.
Esperamos que te haya gustado y que si tienes cualquier duda nos contactes.
¡Un saludo y feliz semana!
05 mar, 2019 • Publicado por María Jose.
Me encanta la explicacion y la fotografia.