Asthavakra desvela la malla de la ignorancia espiritual al rey Janaka
El Canto de Asthavakra es una de las obras cumbre de la espiritualidad hindú, en forma de diálogo, donde se desgrana la base del pensamiento filosófico vedanta advaita (no-dual), de forma sencilla y accesible.
Llegó a mis manos porque leí que Ramana Maharshi acostumbraba a leerlo a menudo y es una fuente de inspiración que, sin duda, te recomiendo (en pequeñas dosis de cada vez, por ejemplo, antes de meditar).
Hacía mucho tiempo un estudiante de las escrituras se esforzaba, tras intensas jornadas de trabajo para mantener a su familia, en aprender sanscrito*. Su esposa en avanzado estado de gestación, le escuchaba, desde otra habitación, cantar las escrituras.
Ya avanzada la noche, en el 8º mes de gestación, del interior del vientre de su esposa, una voz le dijo: "Padre, por favor, esté atento, pronuncias mal ese verso". Agotado por el cansancio, con escasa templanza y sin pensar por qué había sido corregido por un niño no nacido, maldijo la voz de su hijo.
Dado que había adquirido poderes místicos**, por su práctica, la maldición surtió efecto y el niño nació con ocho deformidades; por ello y para ridiculizarlo aun más se le llamó Asthavakra***
Este niño lisiado era un Maestro iluminado, joven y no muy proclive a aceptar estudiantes; por eso cuando el Rey Janaka fue a escuchar de su sabiduría, se le acercó humildemente y el muchacho lo aceptó como discípulo, ocasionó comentarios muy críticos en la comunidad.
Un día el rey llegó tarde a clase, y el Maestro demoró su discurso. Cuando Janaka entraba, Ashtavakra habló: "Hoy he tenido una visión. La capital sufrirá terribles incendios y terremotos. Todos allí morirán. Quienes tengan aprecio por sus objetos valiosos deberán de apresurarse si quieren salvar algunos de ellos".
Todos los monjes se apresuraron a marcharse. Solo quedaron en silencio, el muchacho y el rey, sentados uno frente al otro.
"Gran rey, ¿no hay nada que usted quiera salvar?". Janaka contestó: "Mi señor y amigo, usted es mi único tesoro". El inválido cabeceó ligeramente, como asintiendo, y dijo: "Bien, vale, yo soy tu único tesoro. Ahora monta tu caballo, reúne a mis alumnos y tráelos de vuelta. Me he equivocado".
El rey subió a la grupa, puso un pie en el estribo y, al unísono del balanceo de su cuerpo sobre la silla, la iluminación amaneció en su mente.
En el siguiente enlace te dejo la descarga directa del primer diálogo, espero que te animes a leerlo y que para cualquier consulta me contactes.
*El idioma de la antigüedad de la India, de donde proviene el hindi actual. Traducido significa "perfecto, bien hecho".
**Algunos yoguis los desarrollan tras su práctica, conocidos como sidhis (Yoga sutra de Patanjali) son una tentación que pueden hacer descarrilar el avance espiritual.
***Asthavakra significa "Ocho torceduras"